Aportes de la Diáspora Arabe en Dominicana
Cada día tenemos una nueva invasión, y el comercio es más turco que dominicano. Los turcos eran una clase de gente que viene aquí toda sucia y al poco tiempo viste de paño y casimir;(…)Son gente que gana mucho y consume poco. Algunos se encariñan con la tierra y se quedan en ella: pero la mayor parte, como sanguijuelas, chupan un poco de sangre del país y se van después a derramarla en las montañas del Líbano. De modo que es gente que trae poco y se lleva mucho”(Periódico EL Diario-/26/11/1910/- citado por Edwin R. Espinal Hernández en su trabajo “125 años de la presencia libanesa en Santiago de los Caballeros”).
Aunque el término árabe originalmente provenía de los primeros pobladores de la Península Arábica, ya tiene acepciones más extensivas, como por ejemplo a todo aquel que proviene de un país que habla la lengua árabe. En ese sentido puede tomarse el título de este artículo. Y lo que vamos a contar desdice mucho de la cita que encabeza este escrito, del desprecio con que el periódico santiagués caracterizaba a los nuevos emigrantes.
Como sabemos la inmigración árabe en la República Dominicana, que coincide con la latinoamericana en general, proviene esencialmente de El Líbano y Siria. El pueblo dominicano le llama a todos turcos sin distinción, igual que llamamos gallegos a todos los españoles, siendo ésa sólo una de las nacionalidades históricas de España, como la andaluza, catalana, vasca…Y la realidad fue que los verdaderos turcos (de Turquía) constituyeron el principal enemigo y persecutor de libaneses y sirios cristianos durante la dominación del imperio Otomano que terminó en 1920. De ahí esa inmigración que se suscitó a finales del siglo XIX y principio del XX por causas económicas y discriminatorias. Al formar parte de ese imperio llegaban a nuestro país con pasaportes turcos, causa de la confusión en la denominación del gentilicio. Turcos de verdad también los hubo, así como iranís, iraquís, paquistanís.
¿Qué caracteriza esa diáspora árabe en nuestra nación? Le caracteriza la total integración en la sociedad dominicana. El libanés, sirio, turco…que llega a nuestro país se ha integrado totalmente, siente y hace suya la nueva tierra, dejando en ella su sudor y otras veces su sangre a causa de la lucha política revolucionaria. Es decir, mueren por ella. Se integran en todas las área de la sociedad: después del comercio, en la política, el ejército, la ciencia ,el arte: pintura, música, literatura, poesía; el sindicalismo, los medios de comunicación, en la educación y rectoría de universidades,etc., realizando en cada una sus aportes y progresos.
Esto no significa que en principio no existieran dificultades y enfrentamientos con los ciudadanos locales. Por ejemplo en San Pedro de Macorís, el más importante centro económico por el auge de la industria azucarera, los comerciantes locales trataban de echar a los buhoneros libaneses lo más lejos posible de los ingenios; también eran denunciados por carecer de las patentes o multados reiteradamente a petición de los comerciantes locales. Estos últimos estaban con “el grito al cielo” por los nuevos métodos de comercializar que implementaron. Esos métodos contribuían a que las personas más humildes se hiciesen de ciertos bienes ya que los emigrantes árabes se lo vendían casa por casa y fiado para pagar en módicas cuotas semanales. También, al llevar directamente en mulas las mercancías a los campos, evitaban el abuso al que los intermediarios tenían sometido a los campesinos. Se expusieron a muchos peligros deambulando campo adentro con sus mercancías, siendo asaltados en los caminos por delincuentes.
A muchos dominicanos hasta le molestaba su modo de vida diaria al considerarlos “muy estrictos en sus gastos”, que van con “trajes inadecuados”, que su presencia traía “malas costumbre y vicios denigrantes”, que son gente que gana mucho y gasta poco”. Era la misma cantinela de queja habitual en los ciudadanos de un país que recibe inmigración: El periódico EL Diario de Santiago de los caballeros ya etiquetaba como “invasión” su alta presencia, tildándolos de “elementos inútiles, de ciegos, cojos, reumáticos, enajenados(…) vienen a nuestro país no a producir ni a contribuir en nada a su progreso”, para rematar con una impetuosa, radical e irracional xenofobia propugnando que “Hay que cerrarles las puertas y que se vayan a cantar bajito a las orillas de Jerusalén”-cualquier semejanza con actitudes contra los inmigrantes haitianos no es pura coincidencia-.
Claro, ese criterio de ahorro que practicaban les hacía acumular riquezas, hacerse de otros negocios comprar e instalar locales donde obtenían estabilidad. A seguidas dejaban a los que llegaban nuevo la actividad como buhoneros o vendedores ambulantes. De ahí su medio y alto nivel de vida y las posibilidades de darles estudios universitarios a sus hijos (ya dominicanos) de los que salieron grandes profesionales. Entonces, sociológicamente se han formado todos los tipos sociales posibles en nuestro entorno. Es decir, dominicanos como el que más, o“cristianos viejos” digo yo para comparar el sentido que tuvo esta expresión en España que distinguía a los más criollos de los moros y judíos, gente que vino después o que fueron conversos. Así hemos tenido desde militares golpistas a revolucionarios marxistas; desde políticos derechistas a centro-izquierdistas; desde agrónomos socialdemócratas a excelente comunicadores sociales; desde los que llegan a presidente de la República a aquellos que no calan nunca con sus mensajes a falta de carisma; desde sindicalistas combativos a embajadores, síndicos y profesores progresistas; desde ministros de Turismo y economistas eficientes o fallidos; senadores y diputados honestos y corruptos; desde destacados deportistas a excelentes músicos e innovadores pintores y poetas.
Pero esto se debió a que los primeros árabes fueron asimilados a la cultura dominicana, integrándose de lleno en ella. Contribuyó que la mayoría traía el cristianismo como su culto religioso, un punto de coincidencia con el criollo; que el trato comercial con el pueblo dominicano le hizo dominar el español rapidamente; que no transmitieron su lengua árabe a los hijos. Tras ese panorama poco a poco fueron integrándose y asimiladose totalmente a todos los ámbitos de la sociedad dominicana. En el primer cuarto del siglo XX ya incursionaban en los actos políticos, como aquel en el que contribuyeron en ciertos gastos para homenajear al presidente Mon Cáceres a su llegada a Santiago o en los actos de celebración de la Restauración o la participación de Abrahán Tallaj como guerrillero en una “revolución” de 1912, que sabemos no eran revoluciones sino las clásicas montoneras que los caudillos pequeño-burgueses montaban para derrocar el gobierno de otro caudillo, pero en fin, integrados como todos los dominicanos de su contemporaneidad en las luchas políticas estériles e incivilizadas. En la ciudad de Santo Domingo hubo un impasse en la elección de la Reina del Carnaval porque fue elegida una hija de un descendiente libanés y hubo que dejar dos reinas para evitar altercado porque los familiares de la criolla también daban a su hija también como reina. Pero además, siendo cristianos maronitas con ligera diferencia en los cultos dominicanos y dado el grado al que había llegado su incidencia en la sociedad, se hacia una misa en una iglesia para ellos y otra misa para los dominicanos criollos.
Como este escrito no puede ser un tratado exhaustivo, quiero resaltar a algunas de esas personalidades de descendencia árabe que dejan su aporte a la cultura dominicana, con estas brevísimas y relampagueantes semblanzas.
Ing Amín Abel Hasbúm.- Excelentísimo estudiante e ingeniero. Político de izquierda marxista que relegó su profesión para dedicarse a la lucha clandestina y la organización de los estudiantes y sectores populares. Fundó una de las organizaciones de mayor popularidad en su época en el estudiantado secundario y universitario(FEFLAS) y dirigió el Movimiento Popular Dominicano(MPD), otrora la más poderosa organización de la izquierda marxista. Fue asesinado en su hogar ante los ojos de su esposa e hijos durante el régimen de Joaquín Balaguer. Luego otro descendiente libanés, Rafael Chaljub Mejía dirigió el PCT, un partido heredero del que dirigió antes Amín Abel.
Dr. Antonio Zaglul Elmúdesi. Uno de los más prestigiosos médicos dominicanos. Hizo grandes aportes a la siquiatría dominicana. Su obra “Mis 500 Locos” fue muy popular en Santo Domingo, escrita a raíz de su experiencia como Director del Siquiátrico de Santo Domingo, en el que innovó métodos de tratamiento a los enajenados mental. También escribió una Historia de la Siquiatría Dominicana y la biografía de la primera médico dominicana Evangelina Rodríguez: “Despreciada en la vida y olvidada en la muerte”. Pero no sólo escribió sobre siquiatría y medicina, también elaboró ensayos acerca de diferentes temas, así como semblanzas y biografías de diferentes personalidades y/o conocidos. Le caracterizó un estilo muy popular al escribir sobre la sicología del pueblo dominicano, de sus miedos y sus neurosis. Temas como el gancho, el fucú y la actitud maniaco-depresiva del dominicano que siempre andaba “chivo y bronco”. Fue embajador de la RD en España.
Reconociendo sus méritos en vida en 1990 los profesores de la Escuela 16 de AGOSTO en Herrera en la que laboré por 11 años, consideramos de justicia denominar la biblioteca del centro educativo con su nombre(además era nuestro vecino) por lo que estuvo junto a nosotros, con su manera llana, sin distancias, entrañable en un acto en el que inauguramos el nuevo edificio del plantel. Meritorio también que en 2011 el Archivo General de la Nación dirigido por Roberto Cassá, editarán dos tomos de sus obras selectas. De esas obras extensas hay un pequeño relato muy humano que quizás se pierda en ese océano de textos, “Melanie”, que trata de la actitud de la familia Zaglul, que ha sido emigrante, hacia otro emigrante, una joven”cocola”. Es adecuado para leer en estos tiempos de Sentencias, Tribunal Constitucional ,patriotismo, racismo y xenofobia. Exhorto a leerlo y rescatarlos de ese océano de texto de las Obras Selectas.
Sindicalista Sr.Douglas Hasbúm.- Importante líder sindical que dirigió durante muchos años uno de los más importante sindicato,SNTT, Sindicato Nacional de Trabajadores Telefónicos de la poderosa y, en aquellos tiempos, monopólica Compañía “Dominicana” de Teléfono(CODETEL), de propiedad norteamericana. Lucho hasta el final en una huelga cruenta y definitiva que desembocó en la desaparición de esa importante organización sindical, porque a la compañía norteamericana no le convenía la firmeza y compactación que poseía el gremio. También fue director de la Escuela Nacional de Artes y Oficios
Violinista Aisha Syed.- Simboliza la última generación dominicana descendiente árabe. De padre paquistaní actualmente descolla como una de las mejores violinistas del país. Ha realizado numerosas participaciones en festivales de música en numerosos países, por lo que tiene una proyección internacional. Es la primera dominicana y latinoamericana en ser admitida en la alta escuela musical de Reinos Unidos, la Menuhin School de Londres. Desde niña estuvo integrada a la música siendo el miembro más joven (11 años) en la Orquesta Sinfónica Nacional. Ganó el Concurso Internacional de Violín compitiendo con jóvenes de más de 20 países. En 2009 ganó el galardón de Artista Clásico en los premios Casandra. Luego ha editado el álbum Pasión Latina, en el que, interpreta repertorio latinoamericano y español del argentino innovador del tango Astor Piazzolla, el español Pablo Sarasate, el dominicano Julio Alberto Hernández, Manuel de Falla,etc. Para colofón recientemente ha organizado la Fundación Musis for Life para ayudar a niños dominicanos y británicos a progresar en la música.
Y baste mencionar está limitada lista de persona que hacen o han hecho vida en territorio dominicano: Las comunicadoras sociales y periodistas Lisette Selman, Emely Tueni; Doctores Emil Kase Acta y Josefina Zaiter; Economistas, políticos y empresarios Lic. Antonio Najri, Rafael Abinader,Roberto Saladín; expresidente y presidente de la República Jacobo Majluta Azar y Salvador Jorge Blanco; Militares Salvador Estrella Sadhalá, Elías Wessin y Wessin; educador y dirigente magisterial José Hallal. Guillermo Caram, ex-gobernador del Banco Central, Rafael Suberví, Síndico de la capital; los pintores Aquiles Azar y Angel Haché. Además Teófilo(Kiko) Tabar, Carlos Isaías, Jorge Yeara Nasser, Faisal Abel…
Tenemos, pues, muchas razones para profesarles un profundo amor, cariño y respeto a los emigrantes árabes y los dominicanos que son hoy sus descendientes. Por eso queremos que, cruzando el Atlántico, lleguen estas reflexiones y homenaje a nuestros compatriotas de sangre libanesa, siria, turca, paquistaní…Desde aquí, desde nuestra diáspora en tierras españolas, donde al igual que ellos en sus comienzos, nos ha costado disgustos la integración y la obtención de un lugar respetado en esta sociedad europea.
Cada día tenemos una nueva invasión, y el comercio es más turco que dominicano. Los turcos eran una clase de gente que viene aquí toda sucia y al poco tiempo viste de paño y casimir;(…)Son gente que gana mucho y consume poco. Algunos se encariñan con la tierra y se quedan en ella: pero la mayor parte, como sanguijuelas, chupan un poco de sangre del país y se van después a derramarla en las montañas del Líbano. De modo que es gente que trae poco y se lleva mucho”(Periódico EL Diario-/26/11/1910/- citado por Edwin R. Espinal Hernández en su trabajo “125 años de la presencia libanesa en Santiago de los Caballeros”).
Aunque el término árabe originalmente provenía de los primeros pobladores de la Península Arábica, ya tiene acepciones más extensivas, como por ejemplo a todo aquel que proviene de un país que habla la lengua árabe. En ese sentido puede tomarse el título de este artículo. Y lo que vamos a contar desdice mucho de la cita que encabeza este escrito, del desprecio con que el periódico santiagués caracterizaba a los nuevos emigrantes.
Como sabemos la inmigración árabe en la República Dominicana, que coincide con la latinoamericana en general, proviene esencialmente de El Líbano y Siria. El pueblo dominicano le llama a todos turcos sin distinción, igual que llamamos gallegos a todos los españoles, siendo ésa sólo una de las nacionalidades históricas de España, como la andaluza, catalana, vasca…Y la realidad fue que los verdaderos turcos (de Turquía) constituyeron el principal enemigo y persecutor de libaneses y sirios cristianos durante la dominación del imperio Otomano que terminó en 1920. De ahí esa inmigración que se suscitó a finales del siglo XIX y principio del XX por causas económicas y discriminatorias. Al formar parte de ese imperio llegaban a nuestro país con pasaportes turcos, causa de la confusión en la denominación del gentilicio. Turcos de verdad también los hubo, así como iranís, iraquís, paquistanís.
¿Qué caracteriza esa diáspora árabe en nuestra nación? Le caracteriza la total integración en la sociedad dominicana. El libanés, sirio, turco…que llega a nuestro país se ha integrado totalmente, siente y hace suya la nueva tierra, dejando en ella su sudor y otras veces su sangre a causa de la lucha política revolucionaria. Es decir, mueren por ella. Se integran en todas las área de la sociedad: después del comercio, en la política, el ejército, la ciencia ,el arte: pintura, música, literatura, poesía; el sindicalismo, los medios de comunicación, en la educación y rectoría de universidades,etc., realizando en cada una sus aportes y progresos.
Esto no significa que en principio no existieran dificultades y enfrentamientos con los ciudadanos locales. Por ejemplo en San Pedro de Macorís, el más importante centro económico por el auge de la industria azucarera, los comerciantes locales trataban de echar a los buhoneros libaneses lo más lejos posible de los ingenios; también eran denunciados por carecer de las patentes o multados reiteradamente a petición de los comerciantes locales. Estos últimos estaban con “el grito al cielo” por los nuevos métodos de comercializar que implementaron. Esos métodos contribuían a que las personas más humildes se hiciesen de ciertos bienes ya que los emigrantes árabes se lo vendían casa por casa y fiado para pagar en módicas cuotas semanales. También, al llevar directamente en mulas las mercancías a los campos, evitaban el abuso al que los intermediarios tenían sometido a los campesinos. Se expusieron a muchos peligros deambulando campo adentro con sus mercancías, siendo asaltados en los caminos por delincuentes.
A muchos dominicanos hasta le molestaba su modo de vida diaria al considerarlos “muy estrictos en sus gastos”, que van con “trajes inadecuados”, que su presencia traía “malas costumbre y vicios denigrantes”, que son gente que gana mucho y gasta poco”. Era la misma cantinela de queja habitual en los ciudadanos de un país que recibe inmigración: El periódico EL Diario de Santiago de los caballeros ya etiquetaba como “invasión” su alta presencia, tildándolos de “elementos inútiles, de ciegos, cojos, reumáticos, enajenados(…) vienen a nuestro país no a producir ni a contribuir en nada a su progreso”, para rematar con una impetuosa, radical e irracional xenofobia propugnando que “Hay que cerrarles las puertas y que se vayan a cantar bajito a las orillas de Jerusalén”-cualquier semejanza con actitudes contra los inmigrantes haitianos no es pura coincidencia-.
Claro, ese criterio de ahorro que practicaban les hacía acumular riquezas, hacerse de otros negocios comprar e instalar locales donde obtenían estabilidad. A seguidas dejaban a los que llegaban nuevo la actividad como buhoneros o vendedores ambulantes. De ahí su medio y alto nivel de vida y las posibilidades de darles estudios universitarios a sus hijos (ya dominicanos) de los que salieron grandes profesionales. Entonces, sociológicamente se han formado todos los tipos sociales posibles en nuestro entorno. Es decir, dominicanos como el que más, o“cristianos viejos” digo yo para comparar el sentido que tuvo esta expresión en España que distinguía a los más criollos de los moros y judíos, gente que vino después o que fueron conversos. Así hemos tenido desde militares golpistas a revolucionarios marxistas; desde políticos derechistas a centro-izquierdistas; desde agrónomos socialdemócratas a excelente comunicadores sociales; desde los que llegan a presidente de la República a aquellos que no calan nunca con sus mensajes a falta de carisma; desde sindicalistas combativos a embajadores, síndicos y profesores progresistas; desde ministros de Turismo y economistas eficientes o fallidos; senadores y diputados honestos y corruptos; desde destacados deportistas a excelentes músicos e innovadores pintores y poetas.
Pero esto se debió a que los primeros árabes fueron asimilados a la cultura dominicana, integrándose de lleno en ella. Contribuyó que la mayoría traía el cristianismo como su culto religioso, un punto de coincidencia con el criollo; que el trato comercial con el pueblo dominicano le hizo dominar el español rapidamente; que no transmitieron su lengua árabe a los hijos. Tras ese panorama poco a poco fueron integrándose y asimiladose totalmente a todos los ámbitos de la sociedad dominicana. En el primer cuarto del siglo XX ya incursionaban en los actos políticos, como aquel en el que contribuyeron en ciertos gastos para homenajear al presidente Mon Cáceres a su llegada a Santiago o en los actos de celebración de la Restauración o la participación de Abrahán Tallaj como guerrillero en una “revolución” de 1912, que sabemos no eran revoluciones sino las clásicas montoneras que los caudillos pequeño-burgueses montaban para derrocar el gobierno de otro caudillo, pero en fin, integrados como todos los dominicanos de su contemporaneidad en las luchas políticas estériles e incivilizadas. En la ciudad de Santo Domingo hubo un impasse en la elección de la Reina del Carnaval porque fue elegida una hija de un descendiente libanés y hubo que dejar dos reinas para evitar altercado porque los familiares de la criolla también daban a su hija también como reina. Pero además, siendo cristianos maronitas con ligera diferencia en los cultos dominicanos y dado el grado al que había llegado su incidencia en la sociedad, se hacia una misa en una iglesia para ellos y otra misa para los dominicanos criollos.
Como este escrito no puede ser un tratado exhaustivo, quiero resaltar a algunas de esas personalidades de descendencia árabe que dejan su aporte a la cultura dominicana, con estas brevísimas y relampagueantes semblanzas.
Ing Amín Abel Hasbúm.- Excelentísimo estudiante e ingeniero. Político de izquierda marxista que relegó su profesión para dedicarse a la lucha clandestina y la organización de los estudiantes y sectores populares. Fundó una de las organizaciones de mayor popularidad en su época en el estudiantado secundario y universitario(FEFLAS) y dirigió el Movimiento Popular Dominicano(MPD), otrora la más poderosa organización de la izquierda marxista. Fue asesinado en su hogar ante los ojos de su esposa e hijos durante el régimen de Joaquín Balaguer. Luego otro descendiente libanés, Rafael Chaljub Mejía dirigió el PCT, un partido heredero del que dirigió antes Amín Abel.
Dr. Antonio Zaglul Elmúdesi. Uno de los más prestigiosos médicos dominicanos. Hizo grandes aportes a la siquiatría dominicana. Su obra “Mis 500 Locos” fue muy popular en Santo Domingo, escrita a raíz de su experiencia como Director del Siquiátrico de Santo Domingo, en el que innovó métodos de tratamiento a los enajenados mental. También escribió una Historia de la Siquiatría Dominicana y la biografía de la primera médico dominicana Evangelina Rodríguez: “Despreciada en la vida y olvidada en la muerte”. Pero no sólo escribió sobre siquiatría y medicina, también elaboró ensayos acerca de diferentes temas, así como semblanzas y biografías de diferentes personalidades y/o conocidos. Le caracterizó un estilo muy popular al escribir sobre la sicología del pueblo dominicano, de sus miedos y sus neurosis. Temas como el gancho, el fucú y la actitud maniaco-depresiva del dominicano que siempre andaba “chivo y bronco”. Fue embajador de la RD en España.
Reconociendo sus méritos en vida en 1990 los profesores de la Escuela 16 de AGOSTO en Herrera en la que laboré por 11 años, consideramos de justicia denominar la biblioteca del centro educativo con su nombre(además era nuestro vecino) por lo que estuvo junto a nosotros, con su manera llana, sin distancias, entrañable en un acto en el que inauguramos el nuevo edificio del plantel. Meritorio también que en 2011 el Archivo General de la Nación dirigido por Roberto Cassá, editarán dos tomos de sus obras selectas. De esas obras extensas hay un pequeño relato muy humano que quizás se pierda en ese océano de textos, “Melanie”, que trata de la actitud de la familia Zaglul, que ha sido emigrante, hacia otro emigrante, una joven”cocola”. Es adecuado para leer en estos tiempos de Sentencias, Tribunal Constitucional ,patriotismo, racismo y xenofobia. Exhorto a leerlo y rescatarlos de ese océano de texto de las Obras Selectas.
Sindicalista Sr.Douglas Hasbúm.- Importante líder sindical que dirigió durante muchos años uno de los más importante sindicato,SNTT, Sindicato Nacional de Trabajadores Telefónicos de la poderosa y, en aquellos tiempos, monopólica Compañía “Dominicana” de Teléfono(CODETEL), de propiedad norteamericana. Lucho hasta el final en una huelga cruenta y definitiva que desembocó en la desaparición de esa importante organización sindical, porque a la compañía norteamericana no le convenía la firmeza y compactación que poseía el gremio. También fue director de la Escuela Nacional de Artes y Oficios
Violinista Aisha Syed.- Simboliza la última generación dominicana descendiente árabe. De padre paquistaní actualmente descolla como una de las mejores violinistas del país. Ha realizado numerosas participaciones en festivales de música en numerosos países, por lo que tiene una proyección internacional. Es la primera dominicana y latinoamericana en ser admitida en la alta escuela musical de Reinos Unidos, la Menuhin School de Londres. Desde niña estuvo integrada a la música siendo el miembro más joven (11 años) en la Orquesta Sinfónica Nacional. Ganó el Concurso Internacional de Violín compitiendo con jóvenes de más de 20 países. En 2009 ganó el galardón de Artista Clásico en los premios Casandra. Luego ha editado el álbum Pasión Latina, en el que, interpreta repertorio latinoamericano y español del argentino innovador del tango Astor Piazzolla, el español Pablo Sarasate, el dominicano Julio Alberto Hernández, Manuel de Falla,etc. Para colofón recientemente ha organizado la Fundación Musis for Life para ayudar a niños dominicanos y británicos a progresar en la música.
Y baste mencionar está limitada lista de persona que hacen o han hecho vida en territorio dominicano: Las comunicadoras sociales y periodistas Lisette Selman, Emely Tueni; Doctores Emil Kase Acta y Josefina Zaiter; Economistas, políticos y empresarios Lic. Antonio Najri, Rafael Abinader,Roberto Saladín; expresidente y presidente de la República Jacobo Majluta Azar y Salvador Jorge Blanco; Militares Salvador Estrella Sadhalá, Elías Wessin y Wessin; educador y dirigente magisterial José Hallal. Guillermo Caram, ex-gobernador del Banco Central, Rafael Suberví, Síndico de la capital; los pintores Aquiles Azar y Angel Haché. Además Teófilo(Kiko) Tabar, Carlos Isaías, Jorge Yeara Nasser, Faisal Abel…
Tenemos, pues, muchas razones para profesarles un profundo amor, cariño y respeto a los emigrantes árabes y los dominicanos que son hoy sus descendientes. Por eso queremos que, cruzando el Atlántico, lleguen estas reflexiones y homenaje a nuestros compatriotas de sangre libanesa, siria, turca, paquistaní…Desde aquí, desde nuestra diáspora en tierras españolas, donde al igual que ellos en sus comienzos, nos ha costado disgustos la integración y la obtención de un lugar respetado en esta sociedad europea.
Comida árabe, una rica influencia
en la cocina dominicana
A la hora de preparar un buen quipe se necesita la misma cantidad de carne molida que de trigo y existen tres variedades : el frito, que es el más consumido por los dominicanos, el horneado y el crudo, este último el más exótico por presentación y sabor
A raíz de las constantes inmigraciones de ciudadanos árabes al país, las bondades de la gastronomía de esa nación se han adueñado del gusto del paladar dominicano.
Las albóndigas, los niños envueltos, el quipe y el tipile son algunas de las delicias, que preparadas con algunas variaciones, hoy día gozan del agrado y preferencia criolla.
La gastronomía árabe constituye una interesante y basta mezcla entre lo que es la cocina mediterránea y la india, teniendo como elementos fundamentales a las especias. Esto se debe, particularmente, a las relaciones culturales y comerciales entre los países árabes y algunas regiones asiáticas.
Así lo expresa Rafaela Asilis, quien es cocinera con gran experiencia en la comida árabe. Me gusta la cocina desde que tengo nueve años. Mis abuelos tienen descendencia libanesa y en todo momento, en mi casa lo que se comía era comida árabe. Me especialicé en esta porque siempre fue lo que más me gustó.
Asilis explica que lo que más distingue los platos árabes son las especias, siendo las más utilizadas la canela, pimienta y la malagueta. Destaca que, otros ingredientes que no se pueden quedar en esta comida , están el limón agrio y la cebolla.
Sobre la influencia que reciben los árabes para preparar sus alimentos, explica que proviene del Oriente, donde se producen aceitunas negras y uvas, las que son, también, dos ingredientes esenciales.
Lo que a los árabes más les gusta comer es carne, pero no como se come aquí, de forma entera, sino picada en trocitos. Para ellos comer carne entera es de mal gusto porque dicen que solo un bocado es lo que tú te puedes llevar a la boca, expresa Asilis.
Podría decirse que las carnes son la especialidad en la comida libanesa. Como bien es sabido, los famosos quipes resultan un manjar para los dominicanos. Un buen quipe tiene la misma cantidad de carne molida que de trigo. Lo que quizás pocos conocen es que existen tres variedades de quipes. El quipe frito, que es el más conocido por los dominicanos, el horneado y el que se come crudo.
Al hablar de los rellenos, la experta explica que los de berenjena son uno de los preferidos, tanto por los dominicanos como por los árabes.
¿Qué dice de los niños envueltos? Son los rollitos de hojas de repollo, rellenos de carne molida, arroz y vegetales para luego bañarlos con salsa de tomate.
Los árabes suelen prepararlos más pequeños y los envuelven en hojas de parra en lugar de las del repollo. Éstos reciben el nombre de Maipú.
Los pinchos o brochetas también suelen prepararlos con pedazos pequeños de carne, cebollas y limones. También está el tipile que es una ensalada a base de trigo, tomate, perejil, hierbabuena, puerro, limón y aceite de oliva.
Dulces y bebidas
En lo que a repostería se refiere, uno de los postres tradicionales de la cocina árabe es el Baclawe”. Es un postre que consiste en finas láminas de harina, rellenas de una pasta elaborada con nueces, azúcar, canela y un poquito de vainilla.
Otro dulce típico se elabora con sémola. Su presentación es un triángulo cubierto de nueces o almendras. Reciben el nombre de “delicias turcas” y son una especie de gomitas cuadradas con nueces tostadas.
Asilis destaca que los hay elaborados con trigo y con ajonjolí.
Los polvorones son a base de harina blanca, mantequilla y nueces.
En todo lo que es repostería se utilizan los frutos secos y dátiles. Por ejemplo, los deditos de novia se preparan rellenos con una mezcla de dátiles con canela a diferencia de los muy conocidos rellenos con mermelada de guayaba.
Las bebidas también forman parte importante del banquete. Un muy buen ejemplo es el arak, un trago preparado a base de anís blanco.
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